Ushuaia 22 de Febrero 2017.- Federico Hellemeyer, titular de la Asociación de Fábricas Argentinas Terminales de Electrónica (AFARTE), se refirió a la quita de los aranceles para la importación de productos informáticos que había anunciado en noviembre del año pasado el Gobierno nacional y que lo oficializó esta semana, medida que generó fuertes críticas entre los empresarios y sindicatos locales.

Consultado en cómo afecta la quita de aranceles a la industria local, Hellemeyer dijo que en “líneas generales es perjudicial para el sector fabricante, cuando se lo anticipó en noviembre del año pasado ya tuvo un efecto inmediato en el mercado, en especial sobre los precios del stock existente, y en el caso de la producción informática en Tierra del Fuego se materializó en la pérdida de puestos de trabajo hacia fines de 2016”.

“La norma tiene dos anexos, el que se refiere a la eliminación del arancel a los productos terminados, que regirá desde el 31 de marzo, tiene sólo efecto negativo para el sector, mientras que el anexo de la baja de arancel para partes, que entra en vigencia mañana (por hoy) habrá que ver si les deja margen a las empresas locales para poder competir con un menor grado de integración”, dijo respecto de lo actuado por el Gobierno en relación a la baja del arancel que tendrá un impacto positivo en los costos.

Ante este nuevo panorama, indicó que “con la lista posiciones arancelarias que cambian las empresas se van a poner a evaluar más fríamente y revisar su estructura de costos, si permanece algo de producción nacional va a ser en el continente y no en la isla, recordemos que en Tierra del Fuego el proceso productivo para los productos informáticos es más exigente, de mayor despiece”, expuso respecto de cómo se están preparando las empresas ante el nuevo escenario.

Hay dos factores que inciden en la competitividad

Por un lado, el titular de AFARTE reflejó que “en Tierra del Fuego, como está dentro de un área especial la reglamentación de la Secretaría de Industria es muy exigente en cuanto al agregado de valor nacional y la integración, al ser más exigente y competir mano a mano con el producto importado, con arancel cero quedas fuera de competencia más rápidamente”.

Por otro lado indicó que en “segundo lugar, los mayores costos logísticos por moverse a Tierra del Fuego, no se ven compensados por la ventaja de producir en el Área Aduanera Especial”.

“Cuando el Gobierno salió decir en noviembre pasado que bajarían los aranceles de importación a las computadoras y por ende éstas estarían 50% más baratas, todo el stock que había en el canal se empezó a reventar, eso hizo bajar el precio de estos productos, pero la medida del arancel cero a los productos importados se materializa el 1 de abril, así que hasta que se vea una computadora importada al 0% creo que vamos a estar, en el más rápido de los casos, en mayo o junio”, sostuvo.

Consultado si ante este panorama la industria nacional tiene alguna posibilidad de sobrevivir, dijo que “con la informática no mucho, quedará más en negocios puntuales como puede ser alguna provisión de bienes informáticos al Estado o alguna licitación para programas de inclusión social donde se establezca algún tipo de preferencia nacional, mientras que a nivel consumo es muy incierto lo que pueden llegar a pasar, pero por el momento va a ser imposible desde Tierra del Fuego y con los requerimientos del proceso productivo que tiene el producto informático, poder competir con el producto importado”, concluyó.