Ushuaia 12 de agosto 2022.- La legisladora Mónica Acosta formó parte del equipo conformado por funcionarios, técnicos y referentes ambientalistas que realizó un recorrido aéreo sobre Península Mitre. El viaje formó parte de las tareas que se realizan para lograr que la zona sea declarada como área natural protegida.
La comitiva incluía a legisladores y representantes de organizaciones ambientales y estuvo más de tres horas sobrevolando la grandeza que ofrece Península Mitre. “Fue la primera vez que tuve la experiencia de verla desde arriba -cuenta Mónica Acosta-, y espero que no sea la última. No eran solamente 300 mil hectáreas, sino toda la inmensidad del lugar; podía verse hasta la última piedra del mar”.
El deseo que expresa Mónica -y que representa al de muchos fueguinos-, es un proyecto que parece estar cerca de concretarse, luego de casi 30 años de espera. “Tenemos puestas todas las expectativas en que salga esta Ley, que es acompañada por las Cámaras Hoteleras, de Comercio, de Turismo y por el propio Estado provincial, el cual arrancó su gestión con un decreto para proteger la zona”, se ilusiona Acosta.
Aunque las condiciones parecen dadas, Acosta opina que no es momento de bajar la guardia: “¡A seguro se lo llevaron preso!”, se ríe. “Tenemos que trabajar hasta último momento con la convicción de que la Ley va a salir, logrando el consenso de todas las fuerzas políticas. Esperamos que no se dilate más en el tiempo porque realmente es una necesidad”.
“La gente se pregunta cómo podemos estar en este gris desde hace 28 años; por suerte, cada vez son más los que quieren saber y conocer. Península Mitre tiene que ser custodiada por el pueblo de Tierra del Fuego. En lo personal, ya poder estar presenciando esto, me parece grandioso; le ponemos todas las fichas a que la Ley salga este año”.
Por aquellos que vienen trabajando desde hace años con la ley, Mónica Acosta sabe que “esta es la primera vez que el tratamiento de la ley sucede en el marco de la confluencia entre el Ejecutivo Provincial y la propia Legislatura. No solo eso: además, ocurre en armonía con los que están en primera persona, como, por ejemplo, los pueblos originarios”.
“Pienso que no hay que contraponer la producción con lo ambiental, son dos cosas que pueden convivir a través de la reglamentación de la ley. El sueño es que esta sea una ley que promueva el desarrollo”.