Ushuaia 15 de mayo 2025.-  En una jornada marcada por el descontento y la movilización, los profesionales de la salud pública de Tierra del Fuego realizaron hoy un paro provincial con un alto nivel de acatamiento en hospitales, centros de atención primaria (CAPs) y el Centro de Rehabilitación, en reclamo por mejoras salariales y la implementación urgente de políticas públicas en el sistema sanitario.

La medida fue acompañada por una masiva movilización que partió desde la intersección de las calles Guaraní y San Martín, con una presencia estimada entre 150 y 200 profesionales, en su mayoría de Ushuaia.

“Lamentablemente llegamos a esta jornada de paro para visibilizar la problemática y tratar de alcanzar algún tipo de solución. Es un paro con altísimo acatamiento, lo que demuestra el nivel de malestar en el sector”, expresó Daniel Romero, secretario de organización de SIPROSA (Sindicato de Profesionales de la Salud).

Romero señaló que los reclamos vienen sosteniéndose desde el 27 de marzo, sin respuestas concretas por parte del Gobierno. “Salimos en muchos medios, gracias a periodistas que nos ayudan a visibilizar la situación, pero ni así el Gobierno entiende que la salud es prioritaria”, manifestó.

En ese marco, el dirigente sindical remarcó que “vivimos en una isla, y no hay otra opción que tener un sistema de salud fuerte, con profesionales disponibles. Acá, si no te atienden en el hospital, no hay dónde más ir”.

Además de los salarios, Romero hizo foco en la necesidad de una política sanitaria clara. “Pedimos la presencia de autoridades. Hoy en la marcha están los jefes de departamento, de centro… Los que no están son los del Ejecutivo. La falta de respuesta es total”, afirmó.

Consultado sobre el diálogo con el Ministerio de Salud, Romero fue categórico: “Sí, hay charlas, pero si no hay resultados en lo salarial, es todo en vano. La ministra puede comprender la situación, pero si no hay plata, no sirve. La inflación no se detiene en el supermercado”.

El representante de SIPROSA advirtió que los salarios actuales no alcanzan para sostener la vida cotidiana de los trabajadores. “Un seguro médico cuesta más de 10.000 pesos. Si no hay salud pública, la ciudadanía está doblemente perjudicada: por la falta del servicio y por el costo que implica suplirlo en forma privada”, subrayó.

Romero también describió una situación alarmante respecto a la permanencia de profesionales en el sistema público: “Este no es un sindicato que hace paro todo el tiempo. Hoy se movilizó un número histórico. Pero si esto sigue sin respuestas, los profesionales se van. Algunos dejan la provincia, otros se pasan al sector privado, que también está saturado. El sistema expulsa a sus trabajadores”.

El paro se completó con una concentración frente a la Casa de Gobierno, donde se evaluará la continuidad del plan de lucha.

“La salud mental también es una deuda pendiente. Lo planteamos muchas veces, pero no hay reacción. Estamos esperando una respuesta real, concreta. Necesitamos un resultado económico, pero también un cambio de enfoque en la política sanitaria. No se puede seguir mirando para otro lado”, concluyó Romero.