Ushuaia 08 de octubre 2019.- (Por Abel Sberna) El Corredor Costero del Beagle es un proyecto del Gobierno de Tierra del Fuego que busca unir a la ciudad de Ushuaia con el Cabo San Pío (punto extremo austral de la isla) mediante una ruta que se extienda por toda la costa del Canal Beagle en un recorrido de aproximadamente 130 km.

El proyecto se desglosa en tres tramos, de los cuales uno (el tramo 2) implica el mejoramiento de una ruta existente, y los otros dos, apertura de nueva traza. El tramo 1 conectaría Ushuaia con Almanza por la costa. Actualmente la ciudad y el poblado se encuentran conectados por la ruta J, que difiere en que en viaje se realiza por un valle, en lugar de la costa.

 

El tramo 3 conectaría el final de la actual ruta J, el Rio Moat, con el Cabo San Pio, punto extremo sur de la isla de Tierra del Fuego. El costo estimado de la obra, la cual está siendo ejecutada por la empresa “Felipe Gancedo” era (en abril de 2018) de $1.720.644.084,11 al momento de su adjudicación, aunque se desconoce al valor actual, debido a la inflación y el aumento del valor del dólar de los últimos tiempos. La obra es financiada con un empréstito en dólares tomado por la provincia.

 

Tramo 1 – Cuestiones ambientales

Este tramo está fuertemente cuestionado por debido a que su apertura implica avanzar sobre bosques nativos de categoría 1, la máxima protección que brinda la ley de bosques. Las zonas de categoría 1, o zonas rojas, son consideradas de alto valor para su conservación, debido a que son bosques nativos que albergan valores de biodiversidad significativos o cumplen una función vital en la regulación de diversos factores de la región donde se encuentran.

Sin embargo, mediante una declaración de utilidad pública de la Legislatura Provincial, nuestra ley de bosques permite que una obra afecte a bosques protegidos, por lo que no hay ningún impedimento legal para la obra, que ya lleva afectados por deforestación unos 4 kilómetros de bosques de guindo (Nothofagus betuloides) centenarios entre otras especies características de la región como la lenga (Nothofagus pumilio) canelo (Drimys winteri) maiten (Maytenus magellanica) y notro (Embothrium coccineum) entre otras.

 

Este ecosistema boscoso es muy singular ya que es el único punto del país donde el bosque se encuentra con el mar. La franja costera afectada por el tramo 1 de la ruta es la única que se conserva de todo el Canal Beagle sin intervención antrópica significativa. La apertura de una ruta en ese sector implica la deforestación de numerosas hectáreas de bosque nativo, hábitat de especies características como el pájaro carpintero gigante (Campephilus magellanicus) y posiblemente el huillín (Lontra provocax) una especie de nutria nativa en peligro de extinción que habita los bosques de la región.

A lo largo del canal Beagle reproducen diversas especies de aves acuáticas, entre las que se destaca la caranca (Chloephaga hybrida) y el quetro austral (Tachyeres pteneres). Se observa la presencia de cóndor andino (Vultur gryphus) un ave característica y en peligro de extinción que suele visitar las costas.

 

La zona del Canal Beagle es un área de importancia internacional para la conservación de las aves (AICA). Las principales amenazas para los animales de este sector provienen de los disturbios humanos debidos al desarrollo de la costa entre la ciudad de Ushuaia y el puerto de Almanza. La apertura de la ruta implica un aumento de la vulnerabilidad ya que el acceso que esta brindará dejará expuesto al bosque a situaciones derivadas del uso antrópico, como incendios forestales y contaminación. La modificación de hábitats costeros, la expansión de las fronteras urbanas y la instalación de facilidades de acuicultura. La contaminación debida a efluentes urbanos e hidrocarburos se incrementa acorde al crecimiento demográfico de la ciudad.

 

Cuestiones sociales y turísticas

Por otro lado, la construcción de este tramo implica la destrucción de un sendero de trekking muy apreciado por la población local y los visitantes. Se trata del conocido sendero de “Túnel” que se extiende por 6 kilómetros desde Punta Escarpados hasta la desembocadura de Rio Encajonado, pasando por estancia Túnel. Este sendero es un clásico de la ciudad, ya que se encuentra a pocos kilómetros de la misma, lo que permite que personas de todas las edades puedan entrar en contacto con un ecosistema prístino. Para los habitantes de Ushuaia este sendero representa la posibilidad de acceder a un espacio de descanso y esparcimiento. Es aprovechado para realizar caminatas familiares de baja exigencia, ciclismo de montaña, trail running, observación de aves y visitas educativas, ya que a lo largo del sendero se ven representados diversos tipos de paisajes y variedad de especies vegetales y animales.

El sendero tiene un altísimo valor cultural para la comunidad fueguina, en especial para los vecinos y vecinas de la ciudad de Ushuaia. Es punto de encuentro de miles de personas al año, muchas de las cuales han crecido frecuentando el sector. Al mismo tiempo el sendero es muy frecuentado por turistas, que aprovechas su proximidad para recorrer los bosques de la costa del Beagle con una intervención mínima. Según información promocional del Instituto Fueguino de Turismo (INFUETUR), “el sendero de Túnel es uno de los trekkings más importantes que están por fuera del Parque Nacional”. El artículo 21 de la ley 65 (Régimen Turístico Provincial) indica, refiriéndose a las funciones del INFUETUR, que el instituto tendrá como objeto “proteger en coordinación con los demás organismos competentes de la Provincia, el patrimonio turístico, cultural, histórico, paisajístico y ecológico”. Paradójicamente el presidente de este instituto gubernamental apoya la destrucción de este sendero para la construcción de la ruta.

 

Patrimonio arqueológico

 

El Canal Beagle y sus costas fueron habitados durante miles de años por pueblos canoeros cuya presencia concluyó abruptamente con la llegada de europeos y de los primeros habitantes argentinos que se instalaron en Tierra del Fuego.

Testimonio de la presencia y la vida de estos originales pobladores del sur de América son los abundantes yacimientos arqueológicos distribuidos por toda la costa del Canal Beagle, los cuales constituyen un valioso patrimonio cultural para nuestra provincia, pues son el único registro que nos permite conocer cómo era la vida, la cultura y la sociedad de quienes habitaron el territorio durante miles de años. Por lo cual la preservación de los yacimientos y de los objetos que en ellos se encuentran reviste una gran importancia.

 

La zona costera que será impactada para la construcción del Corredor del Beagle tiene una alta densidad de restos arqueológicos, los cuales corren peligro debido a la construcción de la ruta, ya que el trazado afecta zonas de alta densidad de yacimientos que albergan información sobre el pueblo Yagan, habitantes originarios de las costas del Canal Beagle. Estos yacimientos datan de miles de años de antigüedad y se cree que en su mayoría aún no han sido estudiados o descubiertos, a pesar de la gran labor arqueológica llevada adelante en la provincia en las últimas décadas.

 

Fuente: tsingularis.blogspot.com

Mas información: https://tsingularis.blogspot.com/2019/09/corredor-del-beagle-fundamentos-para-su.html?fbclid=IwAR2sIc_TpBbaBljll5JWCK_LZpE4rkSs0n_-TsyZmSncxasN3B_uDizr8AY