Río Grande 12 de febrero 2019.- El presidente de la Cámara de Comercio de Río Grande y vicepresidente de CAME, Diego Navarro, adelantó a Radio Universidad 93.5 el pedido que formularán a la Legislatura provincial para que declare la emergencia comercial en la provincia. Citó el antecedente en Santa Cruz, donde se lograron frenar los embargos de AFIP a las cuentas de las pymes, que hacen imposible su subsistencia.

“La situación todos la conocemos, en la zona norte hay una situación de inactividad total en la industria, con medidas conocidas como las suspensiones y los despidos. Se están trasladando empresas a Brasil, con lo cual hay un corrimiento de la actividad industrial de Tierra del Fuego y un parate total”, sostuvo.

 

“La caída de las ventas en Río Grande se dio todo el año pasado y el interanual es casi el doble de la caída nacional. La recesión del consumo es muy fuerte y es cierto que las ventas han caído en los comercios tradicionales, aunque hay un incremento en la actividad de las ventas de e-commerce.

La venta en mostrador, la tradicional que genera puestos de trabajo, está cayendo de forma importante y en Río Grande el índice nacional casi se ha duplicado”, reiteró.

 

“Evidentemente los rubros de primera necesidad tienen menos caída; y por otro lado en las economías regionales hay una gran diferencia entre lo que recibe el productor y el precio de venta. Al productor no le alcanza para salir adelante y a la gente le venden a precios que son cinco veces mayores a lo que recibe el productor”, dijo.

“El costo logístico del país es altísimo, con camiones que se mueven de un lado para otro. Los combustibles con caros, las rutas no son las adecuadas, los sistemas no están preparados para ser competitivos. Luego seguramente hay costos para los productos que necesitan frío y, si hay que usar más energía eléctrica o combustible también incide.

 

Además están las operaciones entre mayoristas y minoristas. Todo esto lleva un montón de costos. No es que los intermediarios tengan toda la culpa, sino que son muchos los problemas en la Argentina que hacen que todo esto sea carísimo, porque hay impuestos distorsivos que multiplican el costo.

Está el IVA del 21% pero el impuesto de ingresos brutos se va multiplicando en cada cadena que va pasando y alteran la relación del precio, porque se grava en 5% en cada etapa y tal vez se llega al 12%”, planteó.

 

Reclamos de CAME

De parte del gobierno nacional no hay respuestas. Navarro recordó que en diciembre hubo una reunión sobre logística en la Casa Rosada y “fue la primera mesa nacional sobre el tema.

La CAME concretamente planteó los diferentes costos logísticos que estamos teniendo, la incidencia del cabotaje marítimo, que debería ser mucho menor. La intención es que se equiparen sistemas tanto sea en la parte de transporte marítimo, con del sistema de trenes en otros sectores del país, porque también influye en la Patagonia, para que el transporte terrestre por camión no supere los 500 kilómetros.

 

Para eso debemos mejorar la infraestructura y hablar de los costos argentinos. La mayoría de las banderas de los buques que operan en nuestro país no son argentinas, y al operar con otra bandera los costos son distintos, no únicamente en la parte impositiva sino también en la parte laboral.

Este es uno de los grandes problemas y, si no agarramos el toro por las astas, estamos yendo a una situación muy delicada como país”, advirtió.

 

“No hace falta tener la bola de cristal, porque todos estamos viviendo una caída de actividad generalizada, con un capricho de tener tasas enormemente altas que no permite la actividad económica.

Permanentemente vivimos reclamando que con estas tasas las pymes no pueden seguir adelante, y menos pueden seguir adelante si a la vez, por la imposibilidad de cumplir con las obligaciones, aparte le embargan las cuentas porque en general están en situación irregular con la AFIP”, subrayó.

Fuente: Provincia 23