Ushuaia 02 de diciembre 2025.- El responsable de AMET en Tierra del Fuego, Juan Carrizo, expresó una fuerte preocupación por el rumbo de la política educativa nacional y provincial, al analizar el borrador de la Ley de “Libertad Educativa” y el proyecto de Presupuesto 2026 enviado al Congreso. Según señaló, ambos documentos muestran “una misma línea de retroceso”, al quitar al Estado nacional la obligación legal de financiar la educación pública y, en particular, la educación técnico-profesional.

Carrizo explicó que, aunque desde Nación plantean que se trata de borradores, “el contenido coincide exactamente con lo que ya aparece en el Presupuesto 2026: la derogación de artículos centrales de la Ley de Educación, de la Ley de Financiamiento Educativo y de la Ley de Educación Técnico Profesional”. Para AMET, esto significa dejar a las provincias solas frente a un sistema que ya viene deteriorado: “El financiamiento mínimo garantizado por ley desaparecería, y eso es gravísimo”.

“Estamos viendo retrocesos que recuerdan a los años 90”

Carrizo recordó que en los 90, con la vieja Ley Federal, la educación técnica “prácticamente desapareció”, y que costó más de una década reconstruirla. Destacó que la sanción de la Ley 26.058 durante el gobierno de Néstor Kirchner, con participación del sector técnico, permitió recuperar edificios, equipamiento y especialidades. Pero alertó que ahora ese camino “vuelve a ponerse en riesgo”.

Aunque reconoció que en estos años tampoco siempre se cumplió el piso de financiamiento del 0,6% del PBI, señaló que “al menos existía una obligación legal y una herramienta para reclamar”. La derogación implicaría “romper ese piso y dejar todo librado a la discrecionalidad”.

Falta de diálogo en Tierra del Fuego

Carrizo fue igualmente crítico con la situación educativa provincial. Denunció que el Gobierno fueguino mantiene una política de “cierre al diálogo” con los docentes técnicos y que se priorizan “agencias, polos creativos y proyectos políticos por encima de las necesidades estructurales de las escuelas”.

Cuestionó el estado de precarización laboral en los talleres culturales y en los espacios denominados polos creativos, donde los trabajadores dependen de contratos y cargos a término. Y remarcó que estas iniciativas “no resuelven las carencias reales ni acompañan a los estudiantes que aprobaron todas sus materias y siguen obligados a concurrir a clases sin una propuesta pedagógica alternativa”.

Carreras técnicas sin continuidad y falta de planificación

El dirigente sindical también puso en evidencia una inconsistencia crítica: la provincia multiplica tecnicaturas de Maestro Mayor de Obras pero no ofrece carreras superiores vinculadas, como Ingeniería Civil o Arquitectura. “Formamos chicos para especialidades que después no pueden continuar en la provincia; tienen que irse para profesionalizarse”, alertó.

Frente al desarrollo hidrocarburífero y la creación de la petrolera provincial, AMET propuso avanzar en tecnicaturas y trayectos en petróleo y gas, junto con estudios superiores que permitan retener talento local. “Pero esas discusiones no existen. No hay planificación”, lamentó.

Paritarias, salarios y un sistema que “solo tapa agujeros”

Carrizo señaló que la política salarial del Gobierno provincial agrava el malestar docente: pérdida de casi un 10% contra la inflación anual, liquidaciones tardías, docentes que pasan meses sin cobrar y una línea de créditos del Banco de Tierra del Fuego que terminó siendo “un engaño”, ya que solo beneficiaba a quienes estaban en mora con el propio banco.

“Nos hablan de reforma educativa con ideas bonitas en los papeles, pero desconectadas de la realidad del aula. Parecen escritas por gente que nunca pisó una escuela”, cuestionó.

Además, advirtió que el retraso en contenidos, producto de conflictos, suspensiones y falta de medidas de compensación, impactará directamente en el ciclo lectivo 2026: “El año que viene los docentes van a recibir estudiantes con conocimientos desfasados; será otra cadena de problemas”.

Llamado urgente a una discusión seria

Pese al escenario complejo, Carrizo sostuvo que AMET está dispuesto a debatir, actualizar currículas y modernizar la enseñanza técnica, pero reclamó voluntad política para hacerlo: “Esperamos que este debate nacional marque un punto de partida. Necesitamos discutir en serio qué educación queremos, en el país y en la provincia. Pero para eso hace falta del otro lado alguien dispuesto a escuchar”.

Concluyó señalando que incluso lo inmediato sigue siendo incierto: “No sabemos aún qué se va a cobrar este viernes porque tampoco está el decreto salarial firmado. La incertidumbre ya es total”.