Ushuaia 24 de abril 2018.- El Fiscal ante el Superior Tribunal de Justicia, Doctor Oscar Luján Fappiano, luego de oír a las partes concernidas, dispuso el pasado 18 de abril el reemplazo del Agente Fiscal, Nicolás Arias, quien venía interviniendo en los autos “W, H. D., s/abuso sexual simple reiterado y estupro”, y su sustitución por su par, el Doctor Eduardo Urquiza.

Además, estableció la realización de una audiencia a fin que el Fiscal Arias brinde a las partes querellantes en la causa, las explicaciones y aclaraciones que estime conducentes acerca del contenido, alcance y motivación de su solicitud de omisión de debate presentada.

 

La investigación por el presunto abuso sexual de dos menores de 8 y 14 años por parte del empresario de Ushuaia Héctor Darío “El gringo” Weiss, de 47 años, y dueño de una concesionaria de autos y de una distribuidora de bebidas, arrojó una novedad inesperada en las últimas semanas cuando se conoció que el propio fiscal del caso requirió la omisión del juicio oral y la aplicación de una pena mínima y excarcelable, con argumentos insólitos que produjeron el rechazo inmediato de los familiares y la abogada de una de las víctimas.

Weiss está procesado judicialmente como presunto responsable del abuso sexual reiterado y estupro cometido contra una niña de 14 años, y contra otra que tenía 8 años cuando habrían comenzado los abusos y 11 o 12 años cuando concluyeron, según reconstruyeron los investigadores judiciales en la etapa de instrucción.

 

La causa había sido elevada a juicio y el Tribunal Oral en lo Criminal de Ushuaia había fijado fecha de audiencia para el próximo 7 de mayo.

Sin embargo, el fiscal Nicolás Arias solicitó instrumentar el mecanismo de “omisión de debate”, que implica que el juicio no se realice y que el Tribunal evalúe un pedido de condena propuesto por la Fiscalía.

 

Para ello, Arias tuvo que ajustar la solicitud de pena al máximo que permite ese instituto legal (que es de tres años de prisión en suspenso) y como fundamento del requerimiento utilizó argumentaciones que generaron el rechazo y la indignación de al menos una de las partes querellantes.

Es que al fundamentar el pedido, el fiscal consideró como “agravantes” de la pena la “reiteración de hechos” y la “cercanía familiar con la víctima”, pero como atenuantes, tres argumentos que fueron catalogados de “insólitos” por los familiares de una de las víctimas.