Ushuaia 08 de octubre 2017.- “De ninguna manera se pretende normalizar el apartamiento del Código de Planeamiento Urbano a cambio de un pago, está claramente establecido en la parte resolutiva del Proyecto que no implica bajo ningún concepto una normalización tácita, las excepciones revisten tal carácter, y en consecuencia, su otorgamiento deberá estar siempre fundamentado” destacó el concejal Silvio Bocchicchio (ECoS) autor del proyecto.
Los concejales aprobaron por unanimidad en la última sesión, la creación del gravamen por excepciones al Código de Planeamiento Urbano, incorporándolo a la Ordenanza Tarifaria Municipal N° 5069, por ende aquellos cuya propiedad se valorice más al acceder a este beneficio abonarán un importe porcentual mayor del Impuesto Inmobiliario pactado para cada zonificación.
La normativa sancionada distingue por un lado a aquellos vecinos que solicitan la excepción de manera previa a construir, explicitando argumentos y razones; de aquellos que eludiendo la normativa edifican y luego acuden al municipio y al Concejo a pedir una excepción para normalizar su situación.
De este modo cuando el Órgano técnico competente y el Concejo Deliberante determinen que la excepción constituye beneficio, ahorro o mayor valor que adquieren inmuebles o mejoras para el propietario solicitante, el incremento del impuesto inmobiliario será como mínimo del 30 por ciento.
Para el caso de que el apartamiento del Código de Planeamiento Urbano se hubiese consumado previamente al pronunciamiento normativo del Concejo Deliberante, se establece un incremento adicional del doble respecto del gravamen establecido en la ordenanza específica para cada caso.
“Tal era la demanda de excepciones, que el Departamento Ejecutivo Municipal brinda a los vecinos un «Formulario» para solicitarlas, aceptando de manera explícita que esta es una necesidad, cuando no, una práctica frecuente” señaló Bocchicchio.
En esta línea, el edil de ECoS recordó que «este proyecto lo presentamos en 2012, luego de innumerables pedidos presentadas por vecinos o instituciones en cuyos casos argumentaban que la aplicación de alguna porción del Código es poco viable, demasiado onerosa, y en algunos casos hasta imposible, en función de las características del predio o del proyecto del que se trate; aunque también había casos de especulación al construir que salteando el pleaneamiento urbano y el esfuerzo de la comunidad por apegarse a las normas, convertían en negocio esto de forzar excepciones».
